27 noviembre 2011

Preparando la playa

Esperamos que las terrazas y los troncos en los bordes mantengan la arena en su sitio.




22 noviembre 2011

Baño y visitante

Con los artefactos colocados han quedado completas las cabañas dobles. La visitante fue capturada y liberada fuera de las cabañas.



21 noviembre 2011

Avances en la playa

El calor empezó a sentirse y también la presión para terminar la playita. Falta cada vez menos.


12 noviembre 2011

Avances en los baños

Se terminó el microcemento amarillo sobre la bacha y la bañadera. Yo quería probar como quedaban enlozadas con la pintura epoxi blanca pero Ceci y Rubén no me dieron bola.




Visita

Vinieron de visita Manolo (vecino que vive sobre el Durazno, antes de entrar al Duraznito), Marta (hija del dueño original y Marianela (amiga de Marta, compañera de juegos y todavía dueña del terreno frente a la playa). Charlamos mucho, nos contó cosas sobre la quinta, los terrenos vecinos, etc. Pasamos un buen rato paseando y charlando.

María Elena, Manolo y Rubén

Manolo y Marta

Marta, María Elena y Manolo

Bananal

Al fondo de la playa plantamos bananos. A pesar de que los quemó la helada rebrotaron todos. Veremos si para marzo/abril tenemos algún cacho.


07 noviembre 2011

Estadísticas

Semana interesante.

Prueba de potabilidad

Para purgar una bomba Ceci llenó una botella de agua mineral con agua de la cabaña, extraída de las zanjas internas, o sea la misma del río. Antes de irnos, por error, ingerí varios tragos de la botella hasta que Ceci me dijo: -"No es agua mineral"... Hasta ahora, 30 horas después, parece no tener ningún efecto. Los mantengo al tanto, pero por ahora declaramos que el agua parece potable (puajjjjjjj)

Estrenando una cabaña!!!

Finalmente los astros se alinearon y logramos quedarnos a dormir en la isla. Usamos la primera cabaña que está en condiciones para quedarse (baño completo, agua caliente, vidrios). Habíamos armado un kit de desembarco: horno eléctrico (149 $ = 35 U$S), una pava eléctrica (70 $ = 16U$S), un colchón inflable (400 $ = 94 U$S); y un bolso enorme con diferentes cosas que por suerte en su mayoría quedaron allá. La experiencia fue por demás positiva. Si bien a la mañana fui con Rubén a pagar y sacar a los muchachos, cuando volví a la tarde era otra cosa. El viaje en lancha fue un paseo, nunca vamos para allá atardeciendo. Armamos la cabaña, paseamos un rato, comimos, ... Dormimos bien, aunque el colchón inflable no es para mi peso, tenía miedo de darme vuelta fuerte y que Ceci salga volando. Nos bañamos con agua caliente, uno atrás del otro sin problema, agua bien caliente y abundante. Hubo algunas cosas para ajustar, en las cabañas y en nuestro bolso, ya que no llevamos nada para los mosquitos (aparatito, espiral o similar; por suerte estaba el mosquitero que le habíamos regalado a Rubén).


02 noviembre 2011

Torneado por las enredaderas

Las fotos son muy malas, la cámara esta andando mal. Prometo poner fotos mejores. Las madreselvas y otras enredaderas producen estos efectos tan bonitos.